1. Innovación, proceso de incertidumbre y habilidades creativas

1.1. Divergencia: brainstorming

El objetivo de una fase de divergencia es la de generar el mayor número posible de ideas que den solución a un reto planteado. Lo más importante en este momento es generar la mayor cantidad posible, in dejarnos influir por otros factores: nuestra razón, la posibilidad de llevarlas a cabo o no, la complejidad que tienen, etc. Esos serán aspectos que ya trataremos más adelante.

Algunos consejos para mejorar el pensamiento divergente:

  • No dejarse impresionar por la primera idea que venga a la cabeza (por muy buena que parezca), hay que seguir intentándolo.
  • Cuantas más ideas mejor.
  • Atreverse a plantear ideas locas.
  • Construir también sobre las ideas de lo demás  

La técnica más utilizada para generar ideas en esta fase es el brainstorming.


Brainstorming

El brainstorming es una técnica de diseño en la que, apoyado con recursos sencillos, permite generar ideas en equipo de una forma visual.

Hay cuatro reglas básicas:

  1. No prejuzgar las ideas. Todas las ideas son válidas; ya habrá tiempo más adelante para analizarlas.

  2. Pensar libremente. Todo está permitido y, de hecho, cuanto más nos salgamos de lo habitual, mejor.

  3. La cantidad es importante. Tener muchas ideas nos permitirá más adelante diferenciar cuáles son buenas y no tanto, cuáles se pueden combinar entre sí y cuáles se pueden mejorar.

  4. El efecto multiplicador. Es posible que en algún momento no se nos ocurra nada, y ahí en donde entra en escena el resto del equipo que idea. Sus ideas pueden inspirar y motivar a nuestra mente a pensar en cosas nuevas.

Para llevar a cabo un brainstorming, solamente necesitaremos materiales de oficina (post-its, lápices, etc) y una pared. Se partirá del reto que se intentará solucionar y se irán colocando las ideas en los post-its en la pared.

Una sesión de brainstorming tiene que tener una duración limitada, y dentro de ella se experimentarán diferentes fases de «chispeo» y «chaparrón» de ideas. Una vez finalizado el tiempo, alguien del equipo tomará nota de todas las ideas generadas.


Fuente: Imaginación aplicada, Alex F. Osborn, Ed. Velflex, Madrid 1960