Documento de Apoyo para la elaboración y revisión del Plan de Convivencia en los centros educativos

Sitio: Aula Virtual de Formación en línea (ISMIE)
Curso: Secundaria. Plan de Convivencia y Prevención del Acoso Escolar.
Libro: Documento de Apoyo para la elaboración y revisión del Plan de Convivencia en los centros educativos
Imprimido por: Invitado
Día: domingo, 28 de abril de 2024, 14:57

Descripción

La Subdirección General de la Inspección Educativa ha creado el Documento de Apoyo para la elaboración y revisión del Plan de Convivencia en los centros educativos. Este documento servirá como base para la realización de este curso. Se irán recorriendo las distintas etapas del proceso, y se realizarán actividades sobre algunos de los pasos descritos en cada fase.

1. Presentación

Es necesario insistir en el papel relevante y pertinente de los centros y comunidades educativas en la planificación de acciones, adecuadamente asentadas en estructuras orgánicas y funcionales, que permitan y den vida a experiencias de promoción de la convivencia pacífica y la prevención de comportamientos violentos entre compañeros, enmarcado en la consideración de un abordaje integral de todas las formas de violencia en la infancia y contra la infancia.

Es necesario, consecuentemente, que los centros educativos construyan un marco convivencial que se configure como espacio protector; un contexto dinámico, interactivo y flexible pero claro y visible para toda la comunidad educativa, revisable pero elaborado con criterio y consenso entre todos los agentes de la comunidad educativa.

El Plan de Convivencia de los centros educativos debe entenderse como un proceso dinámico (y no solo como un instrumento) de programación de la acción docente y el marco que rige las relaciones humanas en un centro, construido por toda la comunidad, a través de un proceso de reflexión, con garantías de participación de todos los sectores implicados en la vida de éste. La elaboración del Plan de Convivencia es una oportunidad clave para fortalecer la participación, sobre todo del alumnado y de las familias que se pierde si se convierte en un documento administrativo.

La planificación de acciones para la promoción de la convivencia pacífica en los centros educativos debe enmarcarse en el diseño del prescriptivo Plan de Convivencia que han de elaborar los centros educativos en aplicación de lo establecido el Art. 2 del Decreto 15/2007, de 19 de abril, por el que se establece el marco regulador de la convivencia en los centros docentes de la Comunidad de Madrid.

Con carácter general, los Planes de convivencia de los centros deben contribuir a: 

  • Concienciar y sensibilizar a la comunidad educativa sobre la importancia de una adecuada convivencia escolar y sobre los procedimientos para mejorarla.
  • Fomentar en los centros educativos los valores, las actitudes y las experiencias que permitan mejorar el grado de conocimiento, aceptación y cumplimiento de las normas.
  • Habilitar el desarrollo de procesos, procedimientos y recursos favorecedores de la convivencia pacífica, el respeto a la diversidad y en el fomento de la igualdad entre hombres y mujeres, especialmente de la violencia de género y de las actitudes y comportamientos xenófobos y racistas.
  • Promover la prevención, detección, intervención, resolución y seguimiento de los conflictos interpersonales que pudieran plantearse en el centro, así como de todas las manifestaciones de violencia o acoso entre iguales.
  • Facilitar a los órganos de gobierno y al profesorado procesos claros de intervención, instrumentos y recursos en relación con la promoción de la cultura de paz, la prevención de la violencia y la mejora de la convivencia en el centro.
  • Fomentar el diálogo como factor favorecedor de la prevención y resolución de conflictos en todas las actuaciones educativas. - Potenciar la educación en valores para la paz y en la educación cívica y moral en todas las actividades y su desarrollo en el centro educativo.
  • Impulsar relaciones fluidas y respetuosas entre los distintos sectores de la Comunidad Educativa.

Los centros educativos deben elaborar su Plan de Convivencia al amparo de procesos de análisis previo, diálogo compartido, toma de decisiones conjuntas y acciones de evaluación estables y conocidas por todos.

Con el liderazgo del Equipo Directivo debe cuidarse especialmente la información a todos los grupos:

  • Que el centro otorga especial importancia a las relaciones entre personas desde un marco de valores compartidos basado en el dialogo y la participación.
  • De los ejes principales del plan de convivencia relativos a la prevención e intervención en casos de acoso o conductas irrespetuosas, garantizando que, en estos casos, la intervención con sensibilidad y criterio, pero también con rapidez y rigor.

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En el contexto de una metodología de procesos, parece necesario incluir la definición y organización, de los siguientes procesos:

  1.  Espacios y tiempos específicos, y agentes responsables, para iniciar el trabajo de revisión. Esto es, crear las condiciones para reflexionar sobre el aquí y ahora de la situación de cada centro, clarificar conceptos y habilitar un marco de interpretación compartido de los ámbitos implicados en la convivencia y relaciones interpersonales, con especial a la prevención de la violencia, y desarrollar acciones para pulsar las actitudes, valores y evidencias del sentir general de la comunidad educativa,
  2. Acciones para la revisión e indagación sobre el estado de la cuestión de la convivencia y sus derivadas en el centro. Valoración de recursos y formación con la que se cuenta, percepciones de los diferentes miembros de la comunidad educativa, valoración de las normas de conducta y su grado de cumplimiento, funcionamiento de las estructuras creadas a tal efecto, interpretación de las evidencias y datos con los que cuenta el centro sobre actividades desarrolladas para la promoción de la convivencia pacífica, conflictos detectados y abordados, dificultades y puntos fuertes del centro para dar adecuada respuesta a los conflictos interpersonales y situaciones de maltrato entre compañeros, protocolos de acoso escolar gestionados y principales problemas detectados en su desarrollo, número de protocolos que culminan con resolución de acoso escolar...
  3. Un procedimiento para la búsqueda de soluciones a los problemas evidenciados y la elaboración de un plan para la promoción de la convivencia pacífica y saludable y para la prevención, la detección y la intervención de y en los conflictos interpersonales y posibles situaciones de acoso escolar: formación del profesorado, información, formación y sensibilización del colectivo de padres y alumnado, modelo de análisis e intervención en conflictos, cauces de participación de la comunidad educativa, estructura organizativa, metodología de trabajo en aula, elaboración de protocolos...
  4. Procedimientos para el seguimiento y evaluación del plan o planes diseñados e institucionalizar, asentar y protocolizar las acciones en materia preventiva, de detección e intervención. Hacerlas propias, singulares y sostenibles.

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2. Elaboración del Plan de Convivencia

Elaborar o revisar un plan de convivencia, debe entenderse en todo momento como un proceso en el que, paso a paso, secuencia a secuencia, podamos ir desbrozando diferentes elementos que nos permitan entender, en primer lugar, de qué estamos hablando, cómo lo entendemos todos los agentes y miembros de la comunidad educativa, y, en pasos subsiguientes, abordar las tareas de trabajo conjunto y colaborativo que contribuyan de manera eficaz a definir un marco vivo y consensuado, siempre en el contexto de un proceso de planificación ordenado y coherente:

  1. En el que justifiquemos el trabajo a realizar y definamos y organicemos un grupo interno, un equipo dinamizador (fase de justificación y designación de responsables) que permita liderar el proceso de sensibilización de toda la comunidad educativa para desarrollar la tarea, planificar el proceso, coordinar y dinamizar acciones, facilitar la tarea a los participantes, seleccionar los materiales que pueden contribuir a la formación previa, a la reflexión sobre el proceso. Este grupo interno puede estar configurado por algunos de los miembros de la Comisión de Convivencia del Consejo Escolar. Sin perjuicio de la posibilidad de contar con un grupo dinamizador en el propio claustro.
  2. En el que diseñemos un marco y un proceso para la sensibilización (fase de sensibilización) sobre la tarea a desarrollar. Favorecer la reflexión en los agentes que configuran el contexto educativo y social para que se sienta la necesidad de revisar lo realizado hasta el momento, adopten actitudes favorables al análisis, valoración y elaboración de propuestas de mejora.
  3. En el que se desarrolle un proceso de análisis de la convivencia en el centro (fase de diagnóstico) hasta el momento presente. Hacer visible y explícito qué visión tienen los diferentes agentes y el alumnado, qué es lo que estamos haciendo y sus resultados, grado de satisfacción de necesidades, qué nuevas demandas han surgido y cómo poder abordarlas, qué necesitamos para mejorar, recursos con los que contamos y podemos contar, cómo podemos formarnos para el proceso posterior, etc.
  4. En el que, partiendo de las necesidades detectadas en el análisis de nuestra convivencia, diseñemos un plan de acción (fase de planificación) que defina el modelo de convivencia que deseamos implantar, sus principio y objetivos.
  5. El centro educativo debe diseñar un proceso, seleccionando procedimientos y materiales específicos, para realizar el seguimiento del plan de convivencia, adecuadamente temporalizado y con la referencia explícita a los objetivos que se han propuesto para el curso escolar (fase de evaluación)
  6. El centro educativo debe diseñar, asimismo, una estrategia planificada para informar periódicamente, implicar y responsabilizar a toda la comunidad educativa en el desarrollo del plan de convivencia. Es necesario invertir tiempo y actividades en comunicar lo que se está realizando y despertar sensibilidad acerca de la importancia de la mejora de la convivencia en el conjunto de la comunidad educativa (fase de difusión).

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Conoce con el siguiente vídeo cómo actúa el equipo contra el acoso escolar y cómo se pone en marcha el protocolo.

3. Esquema del proceso

A continuación, se resume el esquema de procesos a desarrollar para la elaboración y/o revisión del Plan de Convivencia.

Al pulsar sobre cada fase / paso te llevará directamente a los contenidos:

4. Algunas ideas esenciales sobre innovación y mejora en la educación

Innovar es siempre un proceso complejo. No es un proceso lineal, sino, más bien, un itinerario donde acción, evaluación, reflexión y reformulación de lo que hacemos se convierten en pasos muchas veces superpuestos, difícilmente disociables. De hecho, cuando hacemos, sin duda investigamos. Y repensamos lo que hacemos. En muchas ocasiones, por no decir siempre, nuestra manera de hacer configura una manera de planificar; y de revisar los resultados de lo que ponemos en marcha. Y viceversa. Casi nada de lo que hacemos lo hacemos por azar. Siempre existe una justificación, un hecho, un conjunto de hechos. Siempre existen unos resultados, más o menos explícitos, que articulan el modo en que vamos trazando nuestros planes. Y llevándolos a la práctica.
Sin embargo, mejorar nuestros planes de acción en los centros educativos requiere, cada vez más, procesos estables de reflexión sobre la práctica. Y procedimientos para detectar errores y formular propuestas novedosas. Y, en este contexto, es imprescindible dedicar tiempo a pensar juntos. Y analizar lo hecho, volver a ordenar nuestras preocupaciones, formularlas en términos de necesidad. Y definir de modo organizado lo que entre todos entendemos que deben ser los ajustes que necesita nuestra institución. Y sus prácticas. En el marco en el que nos encontramos, lo normal es que tengamos que revisar lo que ya definimos y formulamos hace tiempo. Más o menos. O puede que nos enfrentemos directamente a la elaboración, por vez primera, de un Plan de Convivencia en el centro educativo. En todo caso, parece necesario considerar que, sin perjuicio de los matices diferenciales que son intrínsecos a sendas situaciones, deben tenerse en cuenta algunas ideas esenciales antes de iniciar el proceso que vamos a intentar definir e implementar:

  1. El objetivo de nuestra tarea no tiene por qué ser cambiarlo todo, modificarlo todo. Esta tarea puede enfocarse desde una perspectiva secuencial. Detectar, definir, formular y organizar las necesidades de nuestra organización y marcar un trayecto sabiendo priorizar. Incluso, ir poco a poco.
  2. Sabemos mucho de cómo se consiguen efectos colaterales en áreas que aparentemente no tocamos cuando llevamos a efecto buenos y compartidos planes que en principio parecen afectar exclusivamente a un ámbito. Las conexiones y permeabilidad de los logros son siempre una sorpresa agradable.
  3. Tener buenas ideas no es suficiente. Hemos de saber formularlas, organizarlas, definir su posible puesta en acción. Valorar su pertinencia, importancia, urgencia. Y compartirlas. Y, por tanto, casi, con seguridad, mejorarlas. Porque lo que pensamos nosotros no tiene por qué ser siempre la mejor opción. Aun siendo adecuada.
  4. Los procesos de cambio son casi siempre complejos, multifactoriales y no lineales. De hecho, la transversalidad de las ideas, si bien suponen un ingrediente de complejidad, suponen también un seguro de efectividad. La lentitud de algunos procesos puede llegar a ser entendible y justificable.
  5. El papel de los directivos es crucial. Sin su implicación y compromiso, suele rascarse solo la realidad.
  6. La innovación tiene un carácter procesual: reflexión sobre lo hecho, dinamización, planificación, diseño, implementación, evaluación y difusión. El cambio y la mejora no son posible si no se trasladan a las estructuras y a la organización.
  7. Cualquier innovación supone siempre incertidumbre. Y dudas. Vencer resistencias desde la argumentación y el convencimiento es imprescindible.
  8. Pensar que todo va a cambiar con rapidez y que todos los miembros de la comunidad educativa van a estar de acuerdo con lo pensado puede ser un error. Se necesitan planes evolutivos y flexibles.
  9. La toma de decisiones combina conocimiento, estrategia, decisiones a corto medio y largo plazo.
  10. Y mucha intuición (Fullan, M. 2002). 10. El verdadero objetivo debe ser cambiar (a mejor) la cultura de la organización. No llevar a efecto exclusivamente innovaciones aisladas.