¿Qué es Aprendizaje Cooperativo?

Sitio: Aula Virtual de Formación en línea (ISMIE)
Curso: El Aprendizaje Cooperativo en el Aula
Libro: ¿Qué es Aprendizaje Cooperativo?
Imprimido por: Invitado
Día: domingo, 19 de mayo de 2024, 13:13

Descripción


1. Objetivos de la Unidad

Al completar esta unidad serás capaz de:
  • Conocer los fundamentos básicos y antecedentes del Aprendizaje Cooperativo.
  • Identificar las características básicas de las actividades cooperativas en el aula.
  • Identificar aquellas actividades que, a pesar de proponer a los estudiantes trabajo en grupo, no cumplen los principios básicos del Aprendizaje Cooperativo.
  • Conocer las razones para establecer vínculos cooperativos dentro del aula.

  • 2. Introducción a la unidad ¿Qué es Aprendizaje Cooperativo?


    3. ¿Qué es el Aprendizaje Cooperativo?

    El Aprendizaje Cooperativo es el empleo didáctico de grupos reducidos en los que los alumnos trabajan juntos de manera coordinada para conseguir un fin común: resolver las actividades o tareas que el docente les ha propuesto. Al hacerlo, desarrollan su propio aprendizaje y el de los demás.

    En cada sesión, no importa de qué materia se trate, los docentes pueden organizar la docencia para que sus alumnos:

    a) trabajen de manera cooperativa en pequeños grupos asegurando que todos los miembros dominan el contenido facilitado.

    b)participen en una competición para ver quién es el mejor.

    c) trabajen de manera individual en sus propios objetivos de aprendizaje, a su propio ritmo y en su propio espacio para conseguir un resultado preestablecido de excelencia.


    Es decir, en función de cómo el docente organice su docencia da lugar a tres formas diferentes de trabajo en sus alumnos, competitivamente, individualmente o cooperativamente (Johnson y Johnson, 2017).


    Fotografía de Danielle Maclness en Unsplash

    Cuando los alumnos son evaluados siempre de manera individual, se acostumbran a trabajar compitiendo por ser mejores que el resto de la clase y privan a sus compañeros de su éxito (ellos ganan mientras el resto pierde) porque sólo unos pocos consiguen ser sobresalientes. Con ello, sus logros de aprendizaje son independientes y los hacen autónomos, porque perciben que lo que han alcanzado lo han hecho ellos mismos, sin ayuda y con libertad del resto de la clase. Esta forma de docencia conduce a que los estudiantes se centren en su propio interés (superar con éxito su evaluación) que acaban anteponiendo a otros intereses conjuntos.

    La cooperación es un trabajo conjunto en el logro de objetivos compartidos, trabajando de manera cooperativa, los componentes del grupo buscan resultados comunes que les beneficien a ellos y al resto del equipo. Este modo de trabajo maximiza tanto el aprendizaje individual como el del resto de compañeros pues su filosofía es que el éxito de mi compañero me beneficia y el mío a los dos, dándose una situación en la que ambos ganan.

    Prepara tus sesiones para que, a través de la asignación de roles, todos los estudiantes puedan comprender y hacer suyos los contenidos de aprendizaje. Que en tus sesiones, el esfuerzo individual contribuya al éxito de todos los componentes del equipo, haciendo que todos reconozcan su contribución al bien común, acercándose conjuntamente al objetivo que todos comparten. De esta manera conseguirás una satisfacción doble en tus alumnos/as: por lo conseguido individualmente y como grupo.


    3.1. Antecedentes del Aprendizaje Cooperativo


    3.2. Las Bases del Aprendizaje Cooperativo


    Johnson, Johnson y Holubec (1999) definen el aprendizaje cooperativo como:





    3.3. ¿Qué se necesita por parte de los alumnos?


    3.4. Características del Aprendizaje Cooperativo


    3.5. Ejemplo de actividad cooperativa


    4. ¿Qué no es Aprendizaje Cooperativo?

    Es importante, ser capaz de diferenciar entre los grupos de trabajo que simulan el aprendizaje cooperativo de los grupos que realmente lo llevan a cabo. No son trabajo cooperativo los pseudogrupos ni los grupos de trabajo tradicionales porque si bien los alumnos trabajan juntos su desempeño no conduce a los resultados positivos que se obtendrían al trabajar de manera cooperativa:

    Pseudogrupos de aprendizaje: por desconocimiento en muchas ocasiones se organiza a los alumnos para que trabajen en equipo suponiendo que cualquier grupo de alumnos por sí mismos van a generar y promover el aprendizaje de todos los miembros. Cuando no hay certeza de que la estructura de la actividad favorece que los alumnos interactúen entre ellos y compartan información, lo que se está favoreciendo es el llamado pseudo grupo de aprendizaje.

    • En el pseudogrupo los estudiantes deben trabajar juntos, pero no tienen interés en hacerlo, no hay preocupación por el aprendizaje de los demás y aunque aparentemente están juntos continúan compitiendo entre sí. En este modo de trabajo tampoco existe compromiso alguno por el futuro del grupo (Johnson y Johnson, 1999).

    • Estos grupos se forman de manera improvisada, sin planificación previa del docente y el tipo motivación que los impulsa es extrínseca, fundamentalmente conseguir una calificación favorable. En ocasiones los grupos de trabajo se forman contra la voluntad de sus integrantes que preferentemente desearían hacer su trabajo de manera individual (Ortega y Terrazas, 2012).

    En estos pseudogrupos los estudiantes no comparten la información, sino al contrario, trabajan de manera individual sin que su esfuerzo fomente el aprendizaje del conjunto porque mantienen el espíritu competitivo. Si este es el espíritu que predomina en el grupo, se alcanzarán mejores resultados trabajando de forma individual.

    Grupos de enfoque tradicional: tampoco consiguen los beneficios del trabajo cooperativo los grupos de aprendizaje de enfoque tradicional. Son aquellos en los que el docente da unas instrucciones respecto qué deben lograr trabajando juntos, pero las tareas que se les asigna están estructuradas de tal modo que no requieren trabajo conjunto y los miembros sólo interactúan entre ellos para aclarar qué parcela corresponde a cada uno y cómo deben actuar individualmente. Aunque los alumnos intercambian información, no están motivados para enseñar lo que saben al resto de compañeros.

    La predisposición a ayudar y compartir es mínima porque tras repartir el trabajo, cada uno realiza su parte de manera individual para, en una segunda fase, reunirse y unir cada sección en un documento o presentación conjunta que recopile los logros individuales. Lo importante es que todos realicen el mismo esfuerzo.

    En los grupos tradicionales, aunque se comparte la información de manera parcial no hay ninguna motivación para aprender la parte del otro, ni por enseñar lo cada uno ha aprendido al resto de sus compañeros. La situación se agrava si, además, han de hacer el trabajo fuera del aula porque se añade la dificultad de desplazarse a un sitio común o las incompatibilidades de horario entre los miembros que les limita el tiempo en el que realizar las tareas compartidas.

    Es bastante común que algunos compañeros abusen del esfuerzo de los estudiantes más aplicados, quienes acaban haciendo todo o casi todo el trabajo para evitar una mala calificación, por lo que al final del proceso se sienten “explotados” y, como consecuencia, disminuyen su esfuerzo en el trabajo.

    En este caso aunque el resultado de trabajar juntos pueda ser superior que el potencial de algunos miembros, lo cierto es que los estudiantes que más se esfuerzan serían capaces de obtener mejores resultados trabajando de forma individual. Tanto en los pseudogrupos como en los grupos de enfoque tradicional, las tareas se estructuran de tal manera que los estudiantes son evaluados y recompensados como individuos y no como miembros de un grupo, incluso aunque todos reciban la misma calificación.

    4.1. Ejemplo de actividad no cooperativa



    El trabajo cooperativo no se trata de que los alumnos de una clase, de vez en cuando hagan un trabajo en equipo, sino de que estén organizados de manera permanente y estable en equipos de trabajo para aprender juntos y para que el esfuerzo individual conlleve el aprendizaje de sus compañeros. Así, todos los alumnos comparten con el docente su responsabilidad en contribuir al aprendizaje suyo y de sus compañeros convirtiéndose en sujetos autónomos y protagonistas y consiguiendo resultados de aprendizaje más profundos de los que obtendrían con el aprendizaje individual o competitivo.

    5. Razones para establecer vínculos cooperativos

    Más allá de estas destrezas sociales, existen otros fundamentos que deben considerarse a la hora de consolidar vínculos colaborativos en la unidad de un grupo. Entre los más significativos se puede señalar:


    6. En resumen: Los cinco elementos básicos del Aprendizaje Cooperativo

    Los cinco elementos básicos que deben aplicarse rigurosamente para producir condiciones que conduzcan a la acción cooperativa son:


    Primer elemento básico: La interdependencia entre los miembros del grupo. Los alumnos han de creer que están vinculados unos a otros de manera que no tendrán éxito a menos que todo el grupo tenga éxito. Para conseguirlo el docente ha de proponer una tarea clara y un objetivo grupal que les haga ser conscientes de la necesidad de los compañeros. La dependencia de los miembros crea un compromiso de éxito que es la base del aprendizaje cooperativo. Todo aprendizaje cooperativo se empieza al compartir los objetivos del grupo.

    Segundo elemento básico: La interacción entre los estudiantes. El docente debe promover situaciones en las que los componentes del grupo interactúen ayudándose, animándose y compartiendo esfuerzos por aprender. Las situaciones en las que los alumnos se expresen hablando sobre cómo resolver un problema, discutan sobre diferentes conceptos, planteen estrategias de aprendizaje, se enseñen conocimientos entre ellos o explique conexiones entre ideas les da como resultado un aprendizaje más profundo que si lo hicieran de manera individual.

    Tercer elemento básico: Responsabilidad individual. Cada miembro es responsable de una parte del trabajo que le corresponde y que contribuye al éxito conjunto. La responsabilidad individual se consigue cuando se evalúa el desempeño individual y los resultados del grupo. Es importante que los miembros del grupo conozcan quién necesita más ayuda para completar la tarea y que su falta de compromiso conduce a detener el trabajo del resto. Una forma de evaluar esta responsabilidad es elegir, al azar, a un alumno para evaluar su trabajo desde esta perspectiva.

    Cuarto elemento básico: Las habilidades sociales. Los grupos no funcionarán adecuadamente si los alumnos no desarrollan habilidades de liderazgo, toma de decisiones, autoconfianza, comunicación y gestión. Todas ellas son habilidades grupales e interpersonales necesarias para funcionar como parte de un grupo. Pero estas habilidades requieren que el docente las enseñe y las practiquen porque no son innatas. Además es función del docente advertir si se consiguen o no. Dado que la cooperación guarda relación con el conflicto, los procedimientos y técnicas requeridas para manejar conflictos de manera constructiva son importantes en lo grupos cooperativos.

    Quinto elemento básico: Pensamiento o evaluación grupal. Los miembros del grupo deben de evaluar qué ha hecho cada miembro útil para el grupo y qué ha hecho el grupo útil para él mismo. Además, deben reflexionar sobre qué se puede hacer para mejorar el funcionamiento del grupo en sesiones posteriores. Esta reflexión facilita que se reciban comentarios sobre actitudes de su participación desde la perspectiva de construir, no de descalificar, y contribuye al desempeño de las habilidades sociales y a la reflexión conjunta. Los grupos deben determinar qué acciones son positivas y cuáles negativas y deberán tomar decisiones sobre qué conductas conservar, rechazar o modificar. El hecho de analizar cuidadosamente cómo están trabajando juntos les conduce a una mejora sostenida en el tiempo y les supone el incremento de la eficiencia y eficacia del grupo.




    7. Llamada a la acción

    A continuación te invitamos a participar (de forma voluntaria) en el siguiente foro de reflexión. En él, pretendemos crear un espacio en el que compartir ideas, reflexiones, inquietudes, experiencias, consejos, errores a evitar, artículos, libros...relacionados con el Aprendizaje Cooperativo.



    Lanzaremos cuatro mensajes en el foro para guiar el debate, en ellos puedes aportar tu argumentación y participar en las intervenciones del resto de compañeros:


    • ¿Constituye el Aprendizaje Cooperativo una metodología esencial para el aprendizaje por competencias? ¿Qué ventajas crees que ofrece en este sentido respecto a otras metodologías? ¿Consideras que es esencial junto al trabajo con otras metodologías? ¿Has desarrollado alguna experiencia cooperativa en la que hayas trabajado de manera específica alguna de las ocho competencias clave establecidas en el currículum? ¿Has escuchado hablar de las competencias requeridas para los estudiantes del siglo XXI?.

    • ¿Consideras que el Aprendizaje Cooperativo puede ser una herramienta metodológica clave para la inclusión? ¿Has desarrollado actividades con grupos heterogéneos dentro de tu aula? ¿Crees que puede servir para el trabajo con alumnos de altas capacidades? ¿Qué ventajas consideras que ofrece el Aprendizaje Cooperativo para la inclusión respecto a otras metodologías?.

    • ¿Qué importancia otorgas a la idea de implantar la metodología cooperativa a nivel vertical (en todos los niveles) de tu centro educativo? ¿Qué camino formativo podría llevar a tu claustro a conseguirlo? ¿Has realizad en tu centro formación sobre Aprendizaje Cooperativo?.

    • ¿Consideras viable desarrollar experiencias de Aprendizaje Cooperativo en tu aula? ¿Cuales son tus dudas iniciales? ¿Tienes algún consejo basado en alguna experiencia de tu aula? ¿Cuál crees que son los errores típicos a evitar? ¿Podrías recomendarnos algún libro o artículo relacionado con el Aprendizaje Cooperativo?

    8. Vídeo resumen de la unidad