B. Multimedia II: Tratamiento y optimización de imágenes para internet

Sitio: Aula Virtual de Formación en línea (ISMIE)
Curso: Creación de contenidos didácticos con MAX
Libro: B. Multimedia II: Tratamiento y optimización de imágenes para internet
Imprimido por: Invitado
Día: jueves, 21 de noviembre de 2024, 17:51

Descripción

Tratamiento y optimización de imágenes para Internet

B. Multimedia II: Tratamiento y optimización de imágenes para internet

Imagen en formato GIF Imagen en formato JPG con calidad alta Imagen en formato JPG con calidad baja

¿Cómo hemos recortado estas imágenes?

¿Por qué la primera pesa casi 20 KB y la segunda menos de 9 si se ven igual de bien?

¿Por qué la tercera se ve tan mal?

¿Qué importancia tiene?

Al final de esta unidad podremos responder a todas estas preguntas.

1. Formatos de imagen para páginas web

Utilizaremos tres tipos de archivo: GIF, PNG y JPG. En este apartado los estudiaremos uno a uno.

Todos ellos guardan las imágenes comprimidas, pero utilizan diferentes sistemas de compresión.

Algunos ejemplos:

GIF animado GIF animado

PNG-24 PNG-24

JPG JPG

1.1. GIF

Características del formato:

  • Compresión sin pérdida (cuando guardamos, no pierde calidad).
  • Hasta 256 colores.
  • Permite transparencia.
  • Permite animación (GIF animado).

Para optimizar (reducir peso), reducimos el número de colores de la paleta (el número de colores que tendrá nuestro GIF). Por eso este formato no es bueno, generalmente, para fotografías, ya que estas tienen muchos colores. Sí es bueno, sin embargo, para imágenes planas, con pocos colores (un logotipo, por ejemplo).

Esta imagen no debería guardarse en GIF, por ejemplo. La primera imagen es un GIF, y pesa casi 48 KB, mientras que la segunda es un JPG, y pesa solo 24 KB, ¡y además se ve mejor! Fijaos en la parte izquierda del cielo... El motivo es que el GIF tiene un máximo de 256 colores. Está claro que no es un buen formato para esta imagen.

GIF JPG

Esta, sin embargo, pesa menos de 2 KB en GIF (primera imagen), y cerca de 7 KB en JPG (segunda imagen), pero el GIF se ve mucho mejor. Es un GIF con solo 6 colores.

GIF (correcto) JPG (incorrecto)

1.2. JPG

Características del formato:

  • Compresión con pérdida (al guardar en formato JPG se produce una pérdida de calidad en la compresión, de manera que es interesante partir de una imagen con calidad suficiente. Si partimos de un JPG muy comprimido, nunca podremos obtener la misma calidad de imagen).
  • 16 millones de colores.
  • No admite transparencia.
  • No admite animación.

Para optimizar, se reduce la calidad de la imagen.

Este formato es, casi siempre, el mejor a la hora de optimizar fotografías.

Veamos un ejemplo: una imagen JPG con calidad alta y otra con calidad baja. La segunda pesa menos, pero se ve mucho peor.

JPG con calidad alta JPG con calidad baja

1.3. PNG

Características del formato:

Hay dos tipos de PNG:PNG-8 y PNG-24.

  • Compresión sin pérdida (ambos tipos de PNG).
  • Hasta 256 colores (PNG-8).
  • Color verdadero (PNG-24).
  • Ambos permiten transparencia. El PNG-24 permite además transparencias con valores intermedios (opacidad). El PNG-8, en este sentido, es como un GIF: un píxel es transparente u opaco; no hay término medio.
  • Animación: existe una extensión al formato que permite las animaciones. Hasta el momento, sin embargo, se siguen utilizando de forma masiva los GIF animados.

A continuación, tres imágenes PNG. La primera es un PNG-24; la segunda y la tercera son PNG-8. Como vemos, la primera tiene color verdadero, y su transparencia es perfecta. La segunda y la tercera tienen un número de colores limitado (256), y su transparencia es diferente (no admite valores intermedios: un píxel, o es transparente o es opaco). Esto lo vemos más claramente en la tercera imagen, cuyos bordes son negros, no del color del fondo de la página.

PNG-24 PNG-8 con mate correcto PNG-8 con mate negro

PNG es menos conocido, pero cada vez más utilizado. Uno de sus principales problemas era la incompatibilidad con algunos navegadores antiguos y todavía bastante extendidos (Internet Explorer 6, por ejemplo, no muestra correctamente las transparencias de los archivos PNG).

Con la llegada navegadores más modernos, la utilización de imágenes PNG es cada vez más común.

La compresión de PNG es mejor que la de GIF.

1.4. Elección del formato

Hasta que sepáis, con solo ver una imagen, qué formato será el adecuado, podéis probar a guardarla en varios formatos y ver cuál es la que tiene la mejor relación calidad-peso.

En líneas generales:

  • Fotografías: JPG.
  • Imágenes con colores planos o una paleta de colores muy reducida: GIF o PNG.
  • Imágenes con transparencia: GIF o PNG.
  • Imágenes con valores de transparencia intermedios: PNG-24 (atención a la compatibilidad con diferentes navegadores).

2. Recorte y optimización de imágenes para web con GIMP

GIMP es un software libre muy potente para el tratamiento de imágenes.

Captura de pantalla: ilustración y retoque fotográfico en GIMP

2.1. Instalación de plugins en GIMP

Instalación de plugins en GIMP

Quienes conocéis Photoshop posiblemente sabréis que tiene una opción muy práctica llamada “Guardar para web”. GIMP, desafortunadamente, no la tiene “de serie”, pero podemos tenerla instalando un plugin. Es muy fácil.

El plugin se llama “Save for web”.

Quienes trabajéis con MAX ya tendréis GIMP y el plugin instalados.

Descarga e instalación del plugin

Linux

  • MAX / Ubuntu: escribe en un terminal sudo apt-get install gimp-plugin-registry
  • Otras distribuciones: descarga el .tar desde http://registry.gimp.org/node/33 y complila

Eso es todo. Ya tenemos un GIMP con una buena funcionalidad de “guardar para web” que nos facilitará la tarea enormemente.

Luego veremos cómo funciona.

2.2. Tratamiento de imágenes

Imaginemos que parto de esta imagen en alta resolución:

Miniatura de la imagen original

Descargar la imagen original (1125x1500 píxeles)

Vamos a hacer una imagen de 550x367 píxeles que muestre solo una parte de la imagen original:

Miniatura de la imagen recortada

Pasos

Abrimos la imagen (atención: se aconseja trabajar siempre con una copia; nunca con la imagen original. Si por error guardásemos los cambios después de redimensionar la imagen, podríamos perder la foto original).

Abrimos la imagen

Con la primera herramienta (parte superior izquierda) de la Caja de herramientas, seleccionamos el trozo de imagen que queremos mostrar en nuestra web.

Herramienta de selección

Una vez hecha la selección, nos vamos al menú Imagen → Recortar la selección.

Recortar selección

Una vez recortada, vamos de nuevo al menú Imagen → Escalar la imagen. Ahí aparecen las dimensiones actuales de la imagen. Podemos escribir directamente el ancho deseado (habíamos dicho que serían 550 píxeles) para hacer la redimensión. Una vez escrita esta cifra, pincharemos en los eslabones que hay justo a su derecha para que el programa calcule automáticamente la altura de la imagen conservando sus proporciones. Establecida la altura, pincharé en el botón “Escala”.

Escalar la imagen

Si mi imagen mide justo 550x367 píxeles, habré resuelto el problema, pero tal vez todavía no sea así; todo depende de cómo fuese la selección hecha en el paso 1. Si la altura es mayor de 367 píxeles, tendré que recortar los píxeles que sobren. Eso se hace desde Imagen → Tamaño del lienzo. Estableceremos las dimensiones adecuadas (lo más normal es que nos convenga pulsar la opción "Centrar") y pulsaremos en Redimensionar.

Redimensionar el lienzo

Ya tenemos una imagen de 550x367 píxeles.

A continuación, la guardaremos. Veremos cómo hacerlo bien en el próximo capítulo.

En realidad, hay muchas formas de hacer lo mismo.

Por ejemplo: podríamos abrir la imagen, cambiar el tamaño de lienzo a 550x367 píxeles y luego usar la “herramienta mover” de GIMP para colocar el trozo de imagen donde quisiésemos. También podríamos utilizar la “herramienta de escalado” para ajustar aún más el resultado.

Lo mejor es probar y elegir el método que nos resulte más cómodo. A los pocos días, el proceso nos llevará apenas unos segundos.

2.3. Guardado de imágenes

Una vez que tenemos la imagen redimensionada, vamos a guardarla optimizada.

Iremos a Archivo → Save for web y se abrirá un cuadro de diálogo con el siguiente aspecto:

Guardar para web

  • La parte marcada en rojo (bloque superior izquierdo) nos permite seleccionar el formato (JPG, GIF, PNG-8 o PNG-24).
  • Justo debajo –marcado en amarillo– podremos tocar los ajustes del formato seleccionado. Como vemos, los ajustes no son iguales en todos los formatos.
    • En el formato JPG, por ejemplo, podemos jugar con la calidad de la imagen (a mayor calidad, mayor peso final), mientras que en el formato GIF o PNG-8 podremos variar el número de colores (desde 2 hasta 256: a menos colores, menos peso final).
    • Una nota para las imágenes JPG: es aconsejable tener activadas las dos primeras casillas (optimizado y progresivo). El progresivo permite que las imágenes se vayan mostrando en el navegador según se van cargando (lo habréis visto muchas veces en la web: entras en una página, y las imágenes van cargando, de arriba abajo).
  • Debajo de la previsualización de la imagen (marcado en azul) podemos ver el peso que tendrá la imagen una vez guardada.

¿Qué peso debe tener una imagen?

Es una pregunta de difícil respuesta. No podemos decir “más de X está mal”, porque cada imagen es diferente. Depende de sus colores, de la calidad que necesitemos (puedo tener unas fotos muy buenas y querer que se vean especialmente bien). La mejor respuesta: que pesen lo menos posible y que se vean suficientemente bien.

Una cifra orientativa: una imagen como la que veis arriba, con unas dimensiones de 550x367 píxeles, no debería pesar más de 50 KB (y si podemos acercarnos a 40 o menos, tanto mejor). Para conseguirlo, guardaría la imagen en JPG con una calidad de 55 a 65 (generalmente, si la calidad de la imagen original es buena, es más que suficiente con una calidad inferior a 65. Probadlo: la imagen sigue viéndose bien).

Debemos intentar conseguir imágenes ligeras. Cuando más ligeras, mejor. La clave está en que se sigan viendo bien.

¿En qué formato debemos guardarlas?

  • Si mi imagen debe tener transparencia, debo descartar el JPG.
  • Si es una foto o tiene degradados y no debe tener transparencia, casi seguro que el mejor formato es JPG.

Lo ideal es ir probando. Gracias al plugin “Save for web” podemos saber, antes de guardarla, cuánto pesará y cómo se verá la imagen. Podemos jugar con los ajustes hasta dar con el resultado adecuado. Después, pulsamos guardar (“Save”).

Ya tenemos una imagen optimizada.

2.4. Notas generales

Imágenes de los contenidos creados en el portal EducaMadrid

Muchos tipos de contenido (por ejemplo una noticia) permiten seleccionar una imagen principal. Al crear el contenido, la propia aplicación creará de forma automática tres copias de la imagen:

  • Una pequeña, de 200 píxeles de ancho o alto, que se mostrará en la vista resumida del contenido.
  • Una mediana, de 250 píxeles, que se mostrará en la vista detallada del contenido.
  • Una grande, de 550, que se mostrará al ampliar la imagen del contenido.

También guardará la imagen original.

Tres tamaños de imágenes en EducaMadrid

La imagen de 550 píxeles se mostrará al pinchar sobre la imagen mediana que vemos en la vista detallada del contenido. Como vemos, una parte importante de la labor de optimización la hace EducaMadrid por nosotros.

¿Qué dimensiones deben tener las imágenes?

Las que queráis, pero conviene no hacerlas demasiado grandes. Un máximo de 550 o 600 píxeles de ancho o de alto suele ser suficiente para una correcta visualización de las ampliaciones. Las imágenes cuadradas podrían ser algo más pequeñas: 450x450 o 375x375 píxeles, por ejemplo.

Utilizar siempre los mismos tamaños puede hacer que nuestras páginas sean más agradables. Podemos definir un tamaño para las imágenes verticales, otro para las horizontales y otro para las cuadradas, y usarlos siempre. Esto, por supuesto, es a criterio de cada uno.

3. Añadir transparencia a una imagen

Uno de los tratamientos más frecuentes que se puede hacer con una imagen es añadir transparencia al fondo de la misma. Esto es algo que, como es habitual en la informática, se puede hacer mediante distintos métodos.

Usando GIMP, podemos usar por lo general 3 métodos:

  1. Por selección de color
  2. Por selección de forma
  3. Recortando a mano

La elección del método dependerá de lo sencilla o compleja que sea la imagen. Si se trata de una imagen con un claro fondo blanco, y no existe color blanco en el resto de la imagen, lo más rápido y fácil será elegir el método de selección de color.

El siguiente método por dificultad es por selección de forma. Aquí ya no se trata tanto de colores, sino de sumar selecciones de formas limitadas por líneas.

Y si la imagen es más bien compleja, o si hay zonas en las que el fondo se confunde más o menos con la imagen central, no habrá método automático, con lo que habrá que hacer es recortar a mano. Es el método más pesado, pero también es en el que tenemos más control precisamente por ser manual con lo que controlaremos cada paso.

3.1. Selección por color

Vamos a ir viendo un ejemplo, que es como mejor se ven estas cosas. Partimos de la siguiente imagen, un logo con fondo blanco. Queremos dejar ese fondo transparente:

Abrimos la imagen con GIMP, y lo primero que tenemos que hacer es "añadir canal alfa" a la imagen. Al hacer esto, estaremos añadiendo capacidades de transparencia a la imagen. Las imágenes JPG no llevan nunca transparencia con lo que es un paso necesario. Si la imagen inicial fuera PNG, es posible que no permita añadir canal alfa, puesto que ya lo tendrá. Este formato sí que permite transparencia.

A continuación seleccionamos la herramienta de selección por color:

Nos aseguramos a continuación en la ventana de capas, de que esté seleccionada la capa principal (la única que tenemos) de la imagen:

Teniendo la herramienta de selección de color, y una vez esté seleccionada la imagen, hacemos clic en el color blanco, en el principal y más frecuente color que queremos quitar. Con esto, quedará seleccionada una mayoría de la imagen:

Pulsamos "Supr" (o "Del" según teclados) y borramos todo lo seleccionado, con lo que veremos los cuadros grises en lugar del blanco, indicando así que existe fondo transparente:

Como no hemos quitado todo, ahora tendremos que repetir las operaciones anteriores. Es decir, volvemos a seleccionar un tono blanco y borramos:

Cuando veamos que no resulta fácil seleccionar el color que queremos borrar para pasar a transparente, podemos usar la tecla rápida Z, o pulsar en la herramienta de "zoom", la lupa en la caja de herramientas. Hacemos clic después sobre la imagen, y ampliamos para poder elegir mejor:

Así, podemos elegir mejor los colores y borrar de nuevo:

Finalmente, tras unas muy pocas repeticiones, nos quedamos con la siguiente imagen, de la que hemos conseguido dejar el fondo transparente:

3.2. Selección por forma

Igualmente como en el caso anterior, vamos a ir viendo un ejemplo. Partimos de la misma imagen que tiene un fondo blanco, y de la que queremos conseguir un fondo transparente:

Partimos en la ventana de capas, yendo a la opción de "Añadir canal alfa". Con esto añadiremos capacidad de transparencia a la imagen. Si la imagen de partida es de formato JPG, ésta no tendrá nada de transparencia con lo que será necesario este paso. Si la imagen es formato PNG, sí que tendrá transparencia con lo que en este caso es posible que no permita añadir el canal alfa, puesto que ya lo tiene.

Nos aseguramos de que la capa (la única que hay) quede seleccionada:

Escogemos de la caja de herramientas la varita mágica, que es la herramienta para selección según formas:

A continuación vamos a la imagen, y seleccionamos la forma más amplia que queramos pasar a transparente. Es decir, en el color blanco. Se puede observar que no queda todo el color blanco seleccionado, quedando fuera ciertas zonas blancas aisladas de lo demás, como el blanco de dentro de la P grande o de las letras O pequeñas y otros sitios:

Pulsamos la tecla Supr (o "Del" según teclados) para borrar la zona seleccionada:

A continuación tan sólo queda seleccionar zonas pequeñas, e ir borrando. En este caso, y con este método, puede ser un proceso largo, puesto que van a quedar muchas zonas pequeñas inconexas. Esto obliga a ir paso a paso con todas ellas:

En este caso se deja la imagen sin terminar, sencillamente por ser un método inadecuado para esta imagen. No obstante, y por el tema didáctico, queda indicado cómo se tendría que hacer. Si no hay zonas que queden aisladas, seguramente sea éste el mejor método para conseguir un fondo transparente.

3.3. Recorte manual

En este caso, se trata del método más lento y pesado de todos, y usando el mismo ejemplo de los dos casos anteriores, sería totalmente inadecuado. Sería el único método a utilizar siempre que haya zonas en las que se confunda el fondo con la imagen, por coincidir el color por ejemplo.

Básicamente:

Como se puede ver, el recortar manualmente en este caso puede suponer un esfuerzo larguísimo. El proceso como tal, quedaría así indicado.