Vamos a suponer que hacemos una instalación completamente nueva. Después de pinchar la tarjeta arrancamos el ordenador y vamos diréctamente a la BIOS (F2, Supr, etc...). Buscamos la configuración Serial ATA del disco duro y la ponemos en IDE. Grabamos y reiniciamos el PC y volvemos a entrar en la BIOS. Vamos al orden de arranque y colocamos la primera a la tarjeta de recuperación. Grabamos y reiniciamos de nuevo. El ordenador debe detectar la tarjeta y pedirnos el disco de instalación (CDRom hoy, disquete versiones antiguas), lo metemos. Cuando termina la instalación nos ofrece distintas posibilidades. Como suponemos que vamos a realizar una instalación desde cero, elegimos la opción "personalizada". Hay que tener en cuenta que esa opción destruye todos los datos del disco duro y nos obliga a reinstalar el Sistema Operativo (en otro caso elige "Guardar C").
2.A. La tarjeta de recuperación
2.A. La tarjeta de recuperación
Requisitos de finalización
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1. Instalación
Para instalar o desinstalar físicamente la tarjeta necesitamos abrir el ordenador. La tarjeta se pincha en una bahía PCI libre, de color blanco. Es imposible pincharla al revés por su asimetría.
No tengas miedo, abre un ordenador (apagado) y coge la tarjeta en tus manos. Después vuelve a colocarla. Eso sí, no arranques el PC mientras la tarjeta está quitada. No te preocupes, los datos y la configuración del PC no han sufrido daños.