5. Evaluación


La evaluación es un elemento clave en el desarrollo de las competencias que se pretenden alcanzar en todo proceso formativo. Pero no solo eso, permite también garantizar la adecuada certificación, una vez que se ha finalizado el curso. De esta forma, podemos hablar de que predomina una evaluación, fundamentalmente formativa efectuada por los tutores y orientada a conducir el proceso de aprendizaje y, una evaluación sumativa, una vez que se ha completado la formación, que garantice la adecuada certificación.

Este curso emplea distintos instrumentos (escalas, rúbricas, etc.) y estrategias de evaluación (cuestionarios, análisis de productos, etc.) con el fin de garantizar la adaptación de los mismos a los distintos estilos de aprendizaje de los profesores participantes y clarificar, así, la evolución en el grado de adquisición de las competencias requeridas.

Consultar, de forma habitual, las “Calificaciones”, página donde se muestra la evolución de las tareas realizadas, la calificación obtenida en cada una de ellas y los comentarios de retroalimentación ofrecidos por los tutores, encaminados, como ya hemos comentado, a orientar el proceso de aprendizaje, es fundamental para conocer nuestra situación y analizar nuestro proceso formativo. En general las actividades, si se han completado satisfactoriamente, aparecerán como superadas, puede suceder que, en algunos casos, aparezca el ítem “A revisar”, en estos casos habrá un comentario de retroalimentación del tutor orientado a la mejora de la tarea presentada. Una vez finalizado el curso, deberá aparecer el ítem “Certifica”, lo que garantiza la finalización del curso con éxito.

En definitiva, todas las técnicas e instrumentos empleados en nuestros cursos pretenden ser claves para efectuar una evaluación auténtica, valorando las acciones y productos desarrollados por los profesores participantes en el curso, orientada a ofrecer una  retroalimentación clara de su aprendizaje y garantizar, así, la adquisición de las competencias propuestas.